Por: Rebeca Vaisman / 24.09.2025

Karla Bacigalupo superó la incertidumbre de cambiarse de carrera y el temor de migrar a un país nuevo. Sabe lo que es trabajar duro y sufrir de periodos de ansiedad y depresión; valora la importancia de la salud mental, del arte como medio de expresión y del sentido de comunidad para salir adelante. La nueva Miss Perú no cree en la perfección sino en la autenticidad, y está preparada para romper los paradigmas de los certámenes de belleza.



Son las 11 de la mañana y Karla Bacigalupo se sienta a conversar. Está maquillada y peinada —cualquiera podría pensar que tiene que ver con la imagen que quiere proyectar, pero la realidad es que su día ha empezado hace horas y con una clase de automaquillaje de 6 a 8 a.m. Así que, más que perfección o control por el detalle, su apariencia tiene que ver con funcionalidad. De esta manera, está lista para todo lo que tiene que hacer después de esta entrevista: cita con un diseñador, clases de pasarela, coordinaciones para su trabajo social, reunión con un proveedor, otra entrevista y, finalmente, una sesión en el gimnasio. Estos días son así para la flamante Miss Perú, coronada en junio en el Cusco para representar al Perú en el Miss Universo en Tailandia: empiezan muy temprano, tienen la agenda llena y terminan tarde. “Cumplir con el cronograma requiere de mucha disciplina. Desde el comienzo, me di cuenta de que las chicas que participaron en el certamen son muy dedicadas y profesionales”, asegura Karla. Ella sabe de trabajo duro.



VESTIDO ANTHIAS, DE MALVA / JOYAS ALDO & CO



Karla Bacigalupo tiene 33 años. Estudió Administración en la Universidad de Lima y trabajó muchos años en el mundo corporativo, en áreas como trade marketing y ventas. Pero el arte era algo que le apasionaba: de niña siempre estaba pintando, bailando o apuntándose a clases de teatro, improvisación y arte. Si al terminar el colegio se decidió por una carrera más convencional fue por seguir el consejo de sus padres, a quienes toma muy en cuenta, y también porque Karla no conocía las maneras en que se podía llevar una carrera artística. “Después de un tiempo, me di cuenta de que tenía que venir al mundo a hacer lo que yo quería”, recordó. “Sentía que tenía que contar historias, conectar con las personas, estar en otro lado”. En paralelo a su trabajo de oficina, quiso reencontrarse con su lado artístico y llevó clases de actuación. Eso terminó de darle la valentía para cambiar de rumbo completamente. 



REINA PERUANA

Hace casi cinco años que Karla Bacigalupo dejó Lima para estudiar Actuación y Producción en la UCLA, en Los Ánge les. “Quería salir de mi zona de confort, probarme en la meca de la industria”, explica. Además, quiso estar en un lugar donde pudiera aprender de otras comunidades y culturas. “En Los Ángeles, he podido conocer a personas que, como yo, son migrantes y buscan hacerse un espacio en otro medio”, añadió. 



TOP H&M / FALDA MANGO / ARETES ALDO & CO




Más allá de la corona, Karla apuesta por la autenticidad y
busca romper los paradigmas de los certámenes de belleza.




 VESTIDO BALKANIC



 ¿Cómo ha sido vivir en Los Ángeles?

No es un cuento de hadas. Estás yendo a competir con todo el mundo, con gente que ha arriesgado mucho, que ha cambiado todo por conseguir un objetivo. El trabajo tiene que ser constante; no puedes perder la motivación, y tienes que encontrar maneras de reinventarte y de mostrar tu trabajo. Me di cuenta de que, si me quedaba sentada esperando a que me llegaran las opor tunidades, mi carrera jamás iba a suceder. Por eso empecé a producir. Y eso tenemos los peruanos: a donde vayamos, somos muy rápidos para el trabajo, nos movemos.


¿Qué perspectivas sobre ser peruana te ha dado vivir afuera?

El peruano no es conformista, toma mucha responsabilidad sobre su futuro. Lo digo con todo el orgullo del mundo. En Estados Unidos conocí a peruanos talentosísimos y empezamos a colaborar para organizar producciones propias y crear un CV que pudiéramos mostrar. Cuando necesité dinero para poder seguir estudiando e invirtiendo en mis producciones, toqué la puerta de mi cebichería favorita en Los Ángeles y me contrataron sin tener experiencia en atender. Y mira que allá no es fácil encontrar trabajo de mesero, pues todos los actores y artistas lo hacen para ganarse la vida. Así que, al darme ese trabajo, me ayudaron mucho. La comunidad peruana fue un apoyo que me permitió seguir dando pasos en una ciudad tan difícil. Estando fuera me sentí más peruana que nunca.



 VESTIDO ANA G / JOYAS ALDO & CO


Karla participó en un piloto para una serie de Apple TV que todavía está vendiéndose. Además, produjo y escribió un par de cortometrajes —uno sobre la demencia senil de su abuela y otro sobre la relación entre amigos— que actualmente se encuentran en festivales. “Me identifiqué mucho con estos cortometrajes. Me ayudaron a definir el tipo de mensaje que quiero transmitir sobre la condición humana”, reflexionó. 


Es evidente que las noticias sobre deportaciones en los Estados Unidos la mueven profundamente. Al respecto, puede decir que “lo que siempre tiene que primar es la humanidad. Los seres humanos migramos desde los inicios de nuestra historia y es por necesidad. Los migrantes arriesgamos mucho. Los derechos humanos de las personas tienen que respetarse. Y, por encima de los temas legales, no puede perderse la humanidad”, aseguró. 



NUEVO PARADIGMA


Dejar su trabajo estable, reevaluar sus metas de vida y el fallecimiento de su abuela hicieron mella en Karla, y entró en un periodo de depresión y ansiedad, que la llevó a buscar terapia psicológica y psiquiátrica. Sigue en terapia y habla de eso abierta mente, “porque me parece importante que la salud mental no sea un tabú”, aseguró. Tocar estos temas en los guiones de sus historias le ayudaron a comprender mejor los ciclos de su vida, pero también se dio cuenta de que conectaba con su equipo de trabajo y con el público. “A veces pensamos que las cosas nos pasan solo a nosotros, pero resonar con otras personas nos puede quitar mucho peso”, agregó Karla.



VESTIDO MARINE / JOYAS ALDO & CO. / BOTAS VIZZANO


¿Qué opinas sobre la idea de perfec ción que históricamente han promo vido espacios como los certámenes de belleza?

En cualquier industria hay estándares y las mujeres siempre estamos medidas y para metradas. Pero, como una representante de las mujeres peruanas, la idea es que, a partir de nuestro discurso y acciones, podamos romper esos paradigmas. Los certámenes van a evolucionar en la medida en que nosotras como candidatas alcemos nuestra voz, hablemos de temas importantes y justos, y hagamos una plataforma más humana y cercana. Se puede celebrar la belleza y la inteligencia.


Su experiencia le ha demostrado que “la persona más fuerte es la que puede mos trarse vulnerable”. “Cuando perdemos el miedo de ser transparentes, elevamos la conversación y conectamos”, aseguró la Miss Perú. Sobre la fama que hoy empieza a vivir, agrega: “Pienso que otras personas no tienen que endiosarnos, sino sentirse identificadas con nosotros. Mientras más hablemos del ser humano detrás del éxito, más personas se van a aventurar a buscar sus metas. Todos pasamos por altibajos en la vida”, reflexionó.



TIEMPO DE REENCUENTROS

Karla Bacigalupo basa su actividad social como Miss en el poder del arte como medio de expresión y de curación, y enfatiza el legado cultural que tiene el país. Ser Miss Perú y prepararse para el Miss Universo son dos actividades que implican distintas tareas, a las que debe dar igual importancia. Su esposo se ha que dado en su departamento de Los Ángeles, ya que este será un año demasiado ajetreado para ella —aunque se visitarán continuamente—. Ella ha vuelto a vivir con sus padres, aunque por el momento viaja unas cuatro veces al mes, sobre todo a ciudades peruanas.



“Belleza es transparencia, es vulnerabilidad, es empatía”



ABRIGO BALKANICA / JOYAS ALDO & CO.




¿Qué es lo que más extrañaste del Perú en estos años fuera?

Aparte de mi familia y de pasar los domingos comiendo chifa, extrañaba poder viajar internamente. Me encanta escalar, y en diciembre pude hacerlo después de mucho tiempo ¡y en el Huascarán! Los paisajes del Perú son algo que no se encuentra en ningún lado... ¡Y el sentido del humor peruano se extraña terriblemente!


¿Qué significa para ti representar al país?

Es un honor y una responsabilidad llevar el nombre del país de manera internacional. Es un privilegio construir sobre el legado de otras mujeres de distintos rubros. Pienso en Blanca Varela, cuya poesía admiro mucho, o en Yma Sumac, que mantuvo sus raíces y consiguió un éxito que es aún más visible fuera del Perú. Quiero estar a la altura del talento y la tenacidad de los peruanos. 


¿Cómo defines la belleza que te interesa?

Como autenticidad. Belleza es transparencia, es vulnerabilidad, es empatía. Si eres feliz y pleno como persona, valoras a los demás. Creo que la belleza no solo tiene que ser única, sino también compartida.


Recomendados

Suscripción newsletter

He leído, comprendo y acepto los términos y condiciones generales de uso y la política de privacidad, declarando ser mayor de edad.

Mensaje enviado