Es una de las actrices estadounidenses jóvenes con más demanda en la industria del cine. Su carrera promete ser imparable y su vida romántica es tema de interés público. Hoy, a sus 30 años, Margaret Qualley desconcierta, emociona y conquista.
“Lo que se hereda no se hurta”, dice el refrán. Margaret Qualley, hija menor de la actriz Andie MacDowell —reconocida por sus roles en cintas como Groundhog Day y Four Weddings and a Funeral—, es la prueba del legado. Nació en el estado de Montana, en octubre de 1994, participó en competencias de baile mientras crecía, se inscribió en la North Carolina School of the Arts a los 14 años y se mudó a Nueva York para llevar un programa en el American Ballet Theatre a los 16. Cuando se dio cuenta, según sus propias palabras, de que era buena, pero no la mejor, dejó el sueño de ser bailarina de ballet profesional y encontró trabajo como modelo, tal como lo fue su padre Paul Qualley. A los 18 años, Margaret ya era económicamente independiente. Su novio de la época la llevó a una clase de actuación un día y allí empezó este camino.
La han llamado nepo baby, y sí lo es, pero también es verdad que se ha ganado un lugar en la industria con su trabajo. Sus inicios los vimos en Palo Alto (2013), una película independiente de Gia Coppola, y en The Leftovers (2014-2017), la aclamada serie de ciencia ficción de HBO. En esos años, también se viralizó la publicidad de perfumes de Kenzo World, en la que Margaret bailaba enérgicamente, y apareció en las películas The Nice Guys (2016), con Russell Crowe y Ryan Gosling, y Novitiate (2017), donde se lució en el rol de una chica que deseaba convertirse en monja.
Su aparición como la hippie “Pussycat” al lado de Brad Pitt en la película Once Upon a Time…in Hollywood le trajo más proyectos e interpretó a una bailarina en la miniserie Fosse/Verdon (2019) y a Joanna Rakoff en My Salinger Year (2020), con Sigourney Weaver. Con su papel principal en la serie de Netflix Maid (2021), en la que encarna a una joven madre que escapa de una relación abusiva (y en la que su mamá Andie apareció como la madre de su personaje), se ganó a la audiencia —en el primer mes, fue vista en más de 67 millones de hogares— y a la crítica, e incluso fue nominada al Emmy.
Por esa época, conoció a Jack Antonoff, el productor musical y cantante de la banda de indie pop Bleachers, quien también había tenido una relación con Lena Dunham. En una fiesta en un rooftop, empezaron a conversar y nunca pararon de hacerlo. “Jack me hace sentir segura y cómoda. Es la persona que imaginé toda mi vida”, dijo Margaret recientemente. Se casaron en agosto del 2023 en Long Beach Island, Nueva Jersey. Entre las invitadas a la boda estuvieron Taylor Swift, Zoë Kravitz, Cara Delevingne y Lana Del Rey, quien tiene una canción inspirada en la relación de Margaret y Jack. “Simplemente fue tan divertido. Me emborraché tanto. Nunca había tomado tantos espresso martinis en mi vida”, reveló.
Con su vida amorosa viento en popa, también filmó Poor Things (2023), dirigida por Yorgos Lanthimos, y la muy comentada The Substance (2024), la película de terror corporal y psicológico con Demi Moore, que la llevó a ser nominada a un Golden Globe y a un Critics Choice Award. Por estos días, podemos ver a Margaret en Happy Gilmore 2, en Netflix, la secuela con Adam Sandler —quien, a propósito, fue su primer crush famoso—, y en la comedia negra Honey Don’t!, de Ethan Coen y Tricia Cooke, que se estrenó en el Festival de Cine de Cannes. Este año, además, protagonizará Blue Moon con Ethan Hawke y, más adelante, se lucirá en el thriller Huntington. Vamos, que Margaret Qualley sabe tomar las oportunidades y multiplicarlas.
Por estos días, podemos ver a Margaret en Happy Gilmore 2, en Netflix, la secuela con Adam Sandler —quien, a propósito, fue su primer crush famoso—, y en la comedia negra Honey Don’t!, de Ethan Coen y Tricia Cooke, que se estrenó en el Festival de Cine de Cannes. Este año, además, protagonizará Blue Moon con Ethan Hawke y, más adelante, se lucirá en el thriller Huntington. Vamos, que Margaret Qualley sabe tomar las oportunidades y multiplicarlas.