24.02.2020

La fotoperiodista Gihan Tubbeh presenta “Verbos de piedra”, una amplia selección de fotográficas realizadas durante los últimos cuatro años.


Una aproximación poética a la fotografía. Esa es la propuesta de Gihan Tubbeh en su más reciente exposición, “Verbos de piedra”, que actualmente se exhibe en la Sala Luis Miró Quesada Garland, en Miraflores.



Entre imágenes de suelos que parecen derruidos por el paso del tiempo y paisajes que más se asemejan a piedras, la artista nos revela una treintena de instantáneas, dos instalaciones y una escultura titulada “La violencia del tiempo” que, a través del simbolismo y la metáfora, abordan temas como el origen del ser humano, el paso del tiempo, el universo femenino y el poder de la naturaleza.


La serie no cuenta con un hilo narrativo ni tiene un contexto específico. Cada espectador puede entenderlas a su manera. Como apunta Jorge Villacorta, curador de la muestra, “’Verbos de piedra’ se asemeja a una arqueología poética que no aspira a alcanzar el sello de lo concluyente. Busca señales y ritmos ocultos en el mundo visible. En estas imágenes, así como en la poesía, la alquimia del arte captura ecos de algo inconmensurablemente más grande que nuestras huellas en el paisaje. El rumor de un lenguaje codificado indescifrable. Una escritura secreta que a veces permite que surjan armonías que se eclipsan en el misterio”.


“Ella elige mostrarnos cómo lo sólido se funde en el aire gélido. El hielo se hace agua. Y cómo, sin embargo, se produce también lo inverso: un líquido ígneo, la lava, se enfría y se vuelve roca metamórfica... La piedra de sus verbos es densa, traslúcida, elástica y proteica, rugosa y delicuescente, casada con el hielo, el fuego y atmósferas magnéticas”, agrega Villacorta.

Aunque en principio la muestra iba a llamarse “Piedras de sol” —como el poemario de Octavio Paz que forma parte de sus textos fundamentales—, Gihan Tubbeh finalmente se decantó por “Verbos de piedra”, título de un poema de su autoría que atesora con recelo. Al respecto sostiene: “La palabra ‘verbo’ alude a algo en movimiento, en constante mutación, mientras que ‘piedra’, aparentemente, es algo que siempre está quieto. En esta exposición se demuestra que no siempre es así. Los antagonismos conviven en la naturaleza”.



PROFUNDA EXPLORACIÓN

Gihan destacó a nivel internacional en 2010, cuando obtuvo el premio World Press Photo con “Adrián”, una serie de fotografías a un niño con autismo severo. Aquellas instantáneas eran de una estética oscura y perturbadora que supo mantener después, cuando se acercó a pacientes psiquiátricos, en su serie “Delirios nocturnos: exilio interior” (2010); o a prostitutas y demás personajes marginales en “Noches de gracia” (2010).


Sin embargo, a partir de “Vértigo”, exposición presentada hace tres años en el Centro Cultural Inca Garcilaso de la Vega, el ser humano empezó a ser reemplazado por paisajes, animales y texturas como nuevos protagonistas de su obra. “Empecé un ejercicio que consiste en rescatar las huellas del paisaje, lo que nos conduce a su decodificación. Pero en este proceso importan más las preguntas que se suceden que las respuestas que podemos darle”, señala.

Con “Verbos de piedra” el trabajo de Gihan Tubbeh consolida su carácter lírico, que viene explorando desde hace varias muestras. La serie constituye una prolongación de su anterior proyecto, el libro “De tiempo en tiempo, un volcán estalla”, donde sugiere un viaje alegórico a la condición femenina dentro del universo. Para ello, retrata a la tierra como núcleo de fertilidad y generación de vida, sin dejar de confrontarnos con sus accidentes y su capacidad de destrucción. Ahora, la artista podría completar la trilogía con una serie de videos que grabó el año pasado, en su más reciente viaje a Islandia y Grecia.


Sin embargo, como la naturaleza misma, siempre en movimiento, sus intereses discurren en un universo infinito de posibilidad, por lo que este no es el único proyecto que la mantiene ocupada. “Este año volveré a viajar a Europa, porque creo que aún no acaba mi investigación por allá, pero no puedo asegurar que se viene una continuación de ‘Verbos de piedra’ o que ha llegado su fin. Probablemente estemos ante el inicio de una nueva etapa. Lo que sí puedo contar es que este año retomaré el tema del desierto, esta vez relacionado a las culturas Paracas y Nazca. Para eso estoy trabajando al sur de Lima, en Ica”, agrega.

“Verbos de piedra” está abierta al público hasta el 2 de marzo, en el horario de 10:00 a.m. a 10:00 p.m. El ingreso es libre. 

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