Les presentamos las tendencias salidas de las pasarelas de Nueva York, Londres y Milán.
Nueva York.
Marc Jacobs
Las noches en Nueva York recordaron a los ochenta gracias al último show de Marc Jacobs. La pasarela (que empezó una hora y media después por una crisis con un camión que llevaba la ropa) tuvo flashbacks de Yves Saint Laurent y de Chanel en sus inicios con Karl Lagerfeld. Hubo hombreras altas, cinturones de colores estilo cowboy, pantalones a la cintura con los más divertidos estampados, y volantes y flecos que hicieron vibrar la pasarela con una temática entretenida y llena de color.
Oscar de la Renta
Sentimiento latino en la colección de los directores creativos Fernando García y Laura Kim, que pusieron en la pasarela las raíces dominicanas de Oscar de la Renta: los vestidos de tafetán, los sombreros tejidos y los detalles de encaje no se hicieron esperar. Una propuesta que inspira a viajar, pues transporta a un ambiente sensual y ligero en el que el lino y las gasas estuvieron en cada paso. La colección romántica y veraniega que estábamos esperando.
Sies Marjan
Vestidos de seda y gabardinas plastificadas de tonos pastel y burgundy desfilaron en la pasarela de Sander Lak (ganador del premio CFDA 2018 al Talento Emergente). Los vestidos drapeados y los trajes rindieron homenaje a antiguas pasarelas de Calvin Klein y Ralph Lauren. Las tenidas se completaron con un wet look y labios glossy, y con el gran final: una avalancha de confetti y brillo en el Surrogate’s Courthouse Beaux Art de Manhattan.
Color NY
Londres.
Molly Goddard
No faltaron las capas de tul, el color rosado y su clásico toque grunge. En una entrevista mencionó que esta ha sido una reinvención luego de sus primeros 5 años como diseñadora en el Fashion Week; en la pasarela se vio una recreación de sus clásicas piezas en mayor tamaño, con más tela y nuevos patrones. La novedad estuvo en los detalles en denim y en el estampado de flores que llenaron el ambiente de romance y nostalgia. Todo estuvo acompañado por flats y botas altas hasta las rodillas de colores estridentes y satinados, sin olvidar los bolsos rojos cruzados.
Erdem
Casi como un cuadro victoriano se presentó Erdem en su última pasarela que nos trasladó a un jardín del siglo XIX, donde los sombreros anchos y los lazos gigantes fueron los accesorios esenciales para vestidos llenos de volantes y brocados. Hay algo de revolucionario en la conjunción de esta tendencia con una más moderna, pero 'modesta' (aunque nada sobria), algo en la silueta que decide no marcar la cintura y exagerar ciertos volúmenes. Otra característica importante es la paleta saturada de colores entre el fucsia y el amarillo, inspirada en la arquitectura moderna de Luis Barragán.
Burberry
Evolution es el nombre de la última creación de Riccardo Tisci, que empuja la firma hacia el futuro sin dejar atrás la herencia inglesa de Burberry. Los baseball hats son la novedad de la firma y el 'I am a Unicorn' estampado en vestidos de encaje dio el toque divertido, así como el uso de ilustraciones de monos casi como una oda a Darwin. Estuvieron presentes el clásico beige y el logo de la firma en prendas y bufandas. La línea se mantuvo entre lo deportivo, lo tradicional y lo futurista. En ese sentido, vale apuntar que esta fue la primera colección carbono neutral de Burberry, un gran paso frente a la discusión sobre el cambio climático.
Posh Londres
Milán.
Moschino
En esta ocasión la colección fue dedicada a Pablo Picasso, con representaciones de cuadros como La chica frente a un espejo y El arlequín (en versión de Bella Hadid), modelos que desfilaban en marcos gigantes y vestidos en forma de instrumentos. El cubismo y la abstracción definieron la colección y las siluetas bidimensionales e irreales de Jeremy Scott exigieron una especial atención. El show terminó con la cantante Rosalía, que dio el toque final a una propuesta llena de arte.
Gucci
Su primer acto fue de looks blancos y marfil, como uniformes que aludían a centros psiquiátricos y que daban una sensación escalofriante. El segundo acto, sin embargo, llenó la pasarela con un espíritu de los setenta y con colores naranja, verde lima y coral. Una presentación con aires de libertad sexual: con lemas como 'Gucci Orgasmique', vestidos y faldas transparentes, amplios escotes y algunas referencias al BDSM y sus prácticas eróticas, sin dejar de lado el clásico estilo retro de la marca.
Versace
Un clásico Versace. Minifaldas y vestidos cortos; una silueta afilada y acentuada en la cintura; maxilentes en tonos neón y grandes aros en dorado, para mostrar a la mujer sensual y poderosa que inspira a la marca. Se incluyó streetwear con estampados tie-dye y camisetas con logo. En la paleta resaltaron el verde, el rosa, el lila y el naranja. Y, claro, el momento más viral del Fashion Week lo protagonizó Jennifer Lopez, quien cerró el desfile en una versión actualizada del inolvidable jungle dress de los Grammy del 2000, estupenda 20 años después.
Flashy Milán