El cineasta gana popularidad y prestigio – aún más– tras llevarse a casa el Globo de Oro a Mejor Película Extranjera. ¿Estamos ante el próximo gran ganador de los Oscar?
Bong Joon-ho hizo historia el año pasado al convertirse en el primer surcoreano en recibir una Palma de Oro a Mejor Película en el Festival de Cannes (superando a Dolor y gloria, de Almodóvar). Los críticos perfilaban a Parasites, su más reciente filme, como el mejor del año, y los casi ocho minutos de ovación luego de su estreno los respaldaron. Si bien el premio se veía venir, la emoción fue incontrolable: más de tres mil personas lo esperaron en el aeropuerto de Seúl para celebrar junto con él.
La película que retrata las brechas sociales de su país –pero cuya temática es tan universal que ha conectado con el mundo entero– se ha convertido en la favorita de esta temporada de premios: ya ganó el Globo de Oro a Mejor Película Extranjera –sorry de nuevo, Almodóvar– y está nominado al Oscar en cinco categorías, incluyendo la más importante.
El artífice de The Host, una de las cintas más taquilleras de Corea del Sur, y de Okja, el éxito de Netflix, es meticuloso al extremo; aprecia el cine francés y asegura que no piensa en géneros cuando crea: sus guiones viajan libremente entre la comedia, la sátira, el drama y el terror. Sobre esto dijo: “En un artículo escribieron que mis películas son del género Bong Joon-ho. Ha sido el mejor cumplido que he recibido hasta ahora”. Uno que podría ser superado si se hace con la prestigiosa estatuilla dorada.