TEJIENDO CONEXIONES
DANI BAO
La peruana asentada en Nueva York ha creado el podcast Chevere Means Cool,
que le da espacio a la identidad y la innovación del diseño independiente.
Dani Bao llegó a Los Ángeles en el 2014 para estudiar Administración. Tras graduarse, la dinámica y vibrante Nueva York se convirtió en su nuevo hogar. Desde siempre, Dani Bao había sentido una fuerte conexión con la moda y constantemente estaba explorando diferentes estilos. Su compromiso con la sostenibilidad (su especialidad en la universidad fue sobre ese tema) ha sido una inquietud constante que la impulsa. Fue así como comenzó a sumergirse en la escena del diseño independiente. Una reveladora conversación con una amiga le dio la idea de canalizar su conocimiento y afinidad por la moda sostenible en un podcast.
Dani define su podcast como un auténtico DIY y busca que se convierta en una plataforma
para conectar diseñadores y, al mismo tiempo, darlos a conocer.
Así nació Chevere Means Cool, un espacio que no solo celebra el diseño, sino que también revela los relatos de diseñadores y marcas independientes. En cada episodio, Dani lidera un viaje de descubrimiento a través de conversaciones con los fundadores de estas marcas para desentrañar las historias que hay detrás de sus creaciones. Así, y de la mano de Dani, Chevere Means Cool se sumerge en narrativas que inspiran para mostrar la autenticidad y la innovación que late en el corazón de la escena independiente. No obstante, hay un propósito adicional que mueve este proyecto: ser una plataforma que brinda visibilidad a estas marcas emergentes.
Dani empezó a grabar las conversaciones solo con su celular, a manera de experimento. Su idea inicial era probar si el formato le gustaba y terminó cautivándola por completo. Describe su podcast como un verdadero “hazlo tú mismo”, sin muchas pretensiones técnicas, pero sí con bastante cercanía entre ella y sus entrevistados. A medida que el proyecto tomó forma, decidió agregar un nuevo formato que llamó “Sobremesa”. Este concepto lleva a los oyentes a la experiencia de una conversación espontánea entre diseñadores en medio de una cena, entre ruidos de copas y cubiertos, que recrea un ambiente único de complicidad y conexiones inesperadas.
EXPERIENCIA A LA MEDIDA
SEBASTIÁN GRANDA
Sebastián es el director de Sastre, una propuesta de moda y arte que empezó
por revalorizar la sastrería tradicional y que ahora se vuelca en crear espacios y situaciones.
El interés de Sebastián Granda por la moda comenzó a desarrollarse en paralelo con su pasión por la música durante una temporada que pasó en Nueva York con sus padres. Tenía 11 años. Fue entre las estanterías de CD en la icónica megatienda Virgin Records donde floreció su interés al observar el estilo distintivo de los rockeros de la década de los setenta plasmado en las portadas de los álbumes. Las bandas de aquella época tenían una estética única y provocadora en su afán de rebeldía y desafío de las normas (culturales, de género) establecidas. A partir de ese descubrimiento, Sebastián usó la moda como medio de expresión.
La conexión entre la música y la moda llevó a Sebastián Granda
a descubrir su pasión por la creación artística.
Con los años, le dio forma a Sastre, una propuesta artística que abarca un universo creativo que se asienta como un movimiento cultural con dos brazos importantes. Por un lado, está la lifestyle brand Sastre, una marca de ropa que revaloriza la tradición de la sastrería hecha a la medida y que surge a partir de la relación entre consumidor y creador con la finalidad de producir prendas confeccionadas a mano, irrepetibles y llenas de armonía. En el otro extremo se encuentran las Fiestas de Sastre, un punto de encuentro destinado a acoger a la comunidad que comparte los valores de la propuesta. Estos eventos, que también incorporan música, han tenido como escenario el departamento de Sebastián —bajo sus ya características fiestas teñidas de luz roja— y se han convertido en una manifestación de la esencia y la identidad de la marca.
Sebastián ha extendido sus horizontes con otros proyectos en desarrollo. Traspasando su destreza en el diseño más allá de la moda, ha abrazado la creación de muebles. Ya ha dado vida a un modelo que no solo refleja su estética distintiva, sino que también fusiona funcionalidad y estilo. Asimismo, Sastre no se limita a la creación individual, sino que busca tejidos más amplios para la expresión creativa. Aquí entra en juego el cuarto proyecto: la organización de ferias en colaboración con marcas afines. La visión es clara: Sastre no solo pretende ser un canal para la moda, sino un centro vibrante que aglutina diversas formas de expresión artística.
SABOR AUTÉNTICO
CANELA CHINA
Canela China se muestra genuina con un proyecto musical con el que quiere contar historias
y mostrar esa personalidad artística con la que siempre quiso subirse a un escenario.
La música ha sido una parte constante en la vida de Analucía Valdez desde chica. Durante su etapa escolar en un colegio dominico, se destacó como miembro del coro y participó en concursos de canto. Era de las que mostraba su talento musical en reuniones familiares. Estudió Comunicaciones y trabajó varios años en publicidad y producción audiovisual con la intención de explorar y hallar su lugar, porque no terminaba de encontrarse. “Me sentía incompleta”, admite. Esa sensación de vacío se originó por la pérdida temprana de su mamá, cuando Analucía tenía seis años. Aquella experiencia y lo que vino después la inspiraron a emprender una búsqueda de algo más profundo.
La artista, que también escribe y compone sus canciones,
rápidamente se está haciendo un sitio en la industria.
En el 2017, decidió darle un giro a su carrera y le abrió la puerta al arte, ya que siempre sintió conexión con la música y la actuación. Fue un paso audaz, pero, finalmente, la llevó a descubrir su pasión y su propósito en la vida. Como nombre artístico, combinó “Canela”, la forma cariñosa con que su abuela la llamaba por el cálido color de su piel, y “China”, como le dicen sus amigos. Canela China se distingue por su particular voz y un proyecto muy honesto: desestigmatizar la idea de que solo los hombres pueden dedicarse al género urbano y ser una voz en apoyo de los derechos de las mujeres y el amor propio. Su música también se distingue por su versatilidad para fusionar distintos sonidos teniendo lo urbano como base y siempre con la autenticidad que caracteriza sus letras.
Aunque reconoce que empezó tarde su carrera, Canela China ha logrado trabajar con productores como Mike Cerdá y David Escobar, responsables de éxitos para Maluma y Manuel Turizo, respectivamente. Y con Mariana Salazar, entrenadora vocal de artistas como Sebastián Yatra. También ha hecho un tema colaborativo con Yahaira Plasencia, que ya tiene 2,6 millones de visualizaciones en YouTube y que se convirtió en un podio importante para su carrera. Además, la multifacética Analucía ya incursionó en el cine con la cinta La peor de mis bodas 3. Pero va por más. Su intención no es convertirse en una artista de números, sino continuar floreciendo una carrera musical coherente con sus propósitos, sin dejar de perseguir a la businesswoman con la que también se identifica.