Una conversación exclusiva con el diseñador sobre Moschino, su colaboración con H&M y las extravagantes decisiones que lo han llevado adonde está.
'Los típicos vestidos de gala de una alfombra roja no van conmigo. Ya existen demasiados vestidos aburridos en el mundo'. Esta es una de las tantas maneras de resumir el estilo de Jeremy Scott usando las propias palabras de uno de los diseñadores más reconocidos por su relación con la cultura pop, pasión por el color y por encontrar en la extravagancia la mejor forma de crear moda. Ha sido llamado 'el último rebelde de la moda'. Y esa sublevación no solo se ve en sus explosivas colecciones e irreverentes pasarelas. Su biografía demuestra que Jeremy Scott se rebeló, principalmente, a su destino.
Postuló al Fashion Institute of Technology: a los días le llegó una carta que decía que no podían aceptarlo por su falta de creatividad y habilidad artísticas. Scott lloró durante días, pero no dejó de obsesionarse con el trabajo de Jean Paul Gaultier y Martin Margiela, y decidió mudarse a Brooklyn y estudiar Diseño de Modas en el Pratt Institute. Cuando terminó la carrera partió a París, pese a que no tenía ni diez dólares en la billetera. 'Todo el mundo me decía que estaba loco porque no tenía dinero, contactos, no tenía nada. Solo me decían no, no, no. Yo era el único que decía que sí'. En París durmió en casa de amigos y conocidos, y también en los pisos del Metro. Y no fue hasta que armó una colección a partir de retazos de una tienda de suplementos de hospitales que su trabajo empezó a ser notado. Con 23 años, debutó en la Semana de la Moda de la Ciudad Luz con una colección llamada Rich White Women. En 1999 el Council of Fashion Designers of América (CFDA) le entregó el premio a Mejor Diseñador Joven. Y Karl Lagerfeld comentó en una revista que si alguien podría hacerse cargo de Chanel, después de él, sería Jeremy Scott.
En el 2013 fue nombrado director creativo de la casa italiana de lujo Moschino, y fue allí donde su extravagancia y su don para marcar la diferencia se volvieron exponenciales. Homero Simpson, Bob Esponja, las papas fritas de McDonalds: todos estos elementos se volvieron básicos en sus colecciones y marcaron un punto de inflexión en la moda.
Lujo pop
Su último proyecto, la colección Moschino
H&M, en colaboración con la cadena sueca, es una muestra más de la visión que tiene Scott de moda, lujo y actitud. Desde Los Ángeles, ciudad a la que se mudó porque 'hay que aceptar que la moda está dirigida por Hollywood', contestó algunas preguntas:¿Qué te entusiasmó más de tu colaboración con H&M?
Soy 'el diseñador de la gente'
, y me encanta que más de mis fans puedan usar mi ropa y mis diseños. Lo maravilloso de esta colaboración es la habilidad de tomar mi voz y traducirla a los precios de H&M, y hacerla accesible a mucha más gente alrededor del mundo.
¿Cuál es el punto de encuentro entre una marca de lujo, como Moschino y una multinacional del retail, como H&M?
Moschino siempre ha roto las barreras de la moda. Si revisas sus archivos verás que su fundador, Franco Moschino, se divertía con la moda. Yo siempre he creído en mezclar high con low, lujo con calle, glamur con humor. Entonces, para mí esta colaboración es totalmente natural.
Mientras que algunos menosprecian la cultura celebrity y su actual poder, tú la celebras y te diviertes con ella. ¿Cómo definirías lo que está ocurriendo con la cultura pop actual?
Siempre he creído que la moda es parte de la cultura pop. Lo que me gusta de usar elementos de la cultura pop en mi diseño es que puedes comunicar más allá del lenguaje. Yo uso íconos de la cultura popular e inmediatamente la gente sabe a qué me refiero. Puedo hablar con gente en Taiwán o Tombuctú al mismo tiempo. Me encanta tomar iconografía y cambiarla, subvertirla, jugar con ella y luego devolverla al mundo.
Te llaman 'el último rebelde de la moda'. ¿Así te piensas?
Solo sé ser fiel a mí mismo. Siempre he sido un outsider. Nunca he calzado en el molde de la industria; pero ser un outsider no significa ser un solitario. Mis fans usan mi ropa y la hacen parte de su vida.
TEXTO ADAPTADO DE LA VERSIÓN IMPRESA DE J123.